Sara Villegas acaba de fundar Dehesia, la primera línea de cosméticos naturales con certificado ecológico de Extremadura.
Sara, después de años regentando un herbolario, ¿cómo surgió la idea de crear la línea de Dehesia?
La creación de una marca de cosmética ecológica era mi principal objetivo desde antes del herbolario pero quise estudiar bien el mercado y tener un tiempo de estudio e investigación para perfilar bien el proyecto de Dehesia antes de ponerlo en marcha. Llevo unos cuantos años dedicada a la cosmética artesana bajo el nombre de Baobab y he recorrido Extremadura realizando talleres y cursos así como desarrollando productos e ideas que ahora comienzan a sus frutos. El herbolario además me ha permitido sumergirme en el mercado natural y ecológico, conocer a las personas que hoy me apoyan y colaboran en este proyecto y sobre todo, tener la capacidad para llevarlo a cabo.
Encontrar cultivos ecológicos, formulación de la materia prima, packaging, trámites legales… ¿cuál de estos procesos ha sido el más duro? y el más satisfactorio?
Me ha costado mucho tiempo y esfuerzo encontrar la manera de certificar los productos como ecológicos ya que para ello hace falta el doble de trámites legales que si no estuviesen certificados. Las fórmulas de los productos deben estar certificadas por sanidad pero es que además han de ser valoradas y certificadas por un técnico independiente y por nuestra certificadora, ACENE (Asociación de Cosméticos Ecológicos y Naturales Españoles), que incluye entre sus requisitos, no sólo la normativa en lo que se refiere a la composición del cosmético, sino también una normativa de carácter social y medioambiental. Esto nos ha llevado mucho tiempo pero hace que la marca sea coherente en todas las partes que la integran. Eso sí, gracias a ACENE, que nos ha ayudado y aconsejado en todo los aspectos de diseño del producto y a encontar las empresas más adecuadas a nuestra marca (proveedores de materia prima, laboratorios, técnicos, envases, imprentas, distribuidores…), estamos trabajando con las mejores empresas especializadas en cosmética ecológica del país.
Ahora con el producto ya a la venta, ¿cómo es el proceso de distribución con los establecimientos?
Pues como siempre se ha hecho la verdad, hay que salir a vender y que te conozcan. Tenemos la ventaja hoy en día de la comunicación online y eso ayuda mucho a las empresas ubicadas en el medio rural. Además del interés que están poniendo muchos medios de comunicación en nuestro proyecto.
La distribución la hacemos desde nuestro propio punto de venta, el Herbolario La Trementina de Malpartida de Cáceres, y desde allí se envía a las diferentes tiendas y almacenes que deseen distribuir nuestros productos.
Pronto comenzaremos a asistir a ferias del sector tanto a nivel regional como nacional para dar a conocer nuestros productos y estamos incluso empezando a enviar información a empresas exportadoras que se empiezan a interesar por la cosmética ecológica. En nuestra tienda online www.dehesia.com también se pueden adquirir nuestros productos y pronto también en otros comercios virtuales.
Una de las grandes ventajas de adquirir productos ecológicos es la ayuda a la economía local. ¿Cuántos puestos de trabajo tanto directos como indirectos puede general una empresa como Dehesia?
Dehesia nace como proyecto propio y que gestiono junto al Herbolario pero al cual se están empezando a incorporar personas que me ayudan en las diferentes tareas que conlleva la la distribución de productos: diseño y publicidad, comunicación, fotografía, traducciones, administración, etc. Así pues, empezamos como empresa pequeña pero que espero que vaya creciendo y generando cada vez más empleos tanto directos como indirectos.
¿Qué le diría a las personas que dicen que los cosméticos no sirven para nada?
Cada uno opina según experiencias vividas… a mí los cosméticos naturales me ayudaron a curar una piel atópica que sufría desde que era bebé y, a raíz de eso, he ido incorporando las plantas y la alimentación saludable en mi rutina diaria alejándome de las alergias e intolerancias que sufría. En todos estos años de trabajo e investigación me he dado cuenta que las plantas, en su dosis y forma adecuada, aportan grandes beneficios al cuerpo tanto a nivel externo como interno. No considero que los cosméticos sean imprescindibles ya que la piel es capaz de nutrirse sola, pero sí que ayudan a mantener la hidratación de la piel y colaboran en su bienestar. La piel es un órgano más y el más grande que poseemos y se debe cuidar y alimentar igual que cualquiera de los demás.
Además de necesitar mucha menos cantidad de producto y ser más saludable, ¿qué otros beneficios tiene usar cosmética ecológica?
La cosmética ecológica lo que aporta es alimento natural para la piel. Y lo más improtante de todo es lo que no aporta, que son los tóxicos invisibles comúnmente aceptados que pueden llegar a acumularse en la sangre siendo la causa de desequilibrios y enfermedades en nuestro cuerpo. La cosmética natural aporta nutrientes esenciales a la piel por su composición natural y se nota que la piel se siente bien cuando utilizas este tipo de productos. La piel se calma, se recupera y se estabiliza buscando de forma natural su equilibrio, que es lo que se pretende. Cada piel es diferente y los ingredientes naturales se adaptan para encontrar siempre el beneficio y la regeneración del medio que se les plantea.
¿Cuál es el producto su producto estrella en este momento?
Las cremas faciales siempre es lo más demandado, pero sí que es verdad, que los productos de limpieza y nutrición diaria (geles, champús, cremas corporales…) junto con los bálsamos y los jabones naturales se utilizan mucho y cada vez más. Crece la demanda que busca marcas naturales de confianza y el sector busca mejorar sus texturas y composiciones para obtener productos completamente naturales y puros pero que se adaptan perfectamente a esa demanda.
Extremadura es una gran exportadora de tomates, cerezas, miel, higos, uvas… ¿veremos algunos de estos ingredientes en próximos productos?
Sí, poco a poco iremos incorporando estos ingredientes ecológicos en las fórmulas según vayamos ampliando las líneas de productos. Me interesa mucho el higo chumbo como antiarrugas y regenerados y las uvas como aporte de antioxidantes. También la miel de flores y otros subproductos de las abejas como es el propóleo o la jalea real. Me interesan las plantas aromáticas autóctonas y, sobre todo, la jara por su aceite esencial. Crecen los cultivos ecológicos certificados y los puntos de distribución en la región por lo que en pocos años podremos ver a Extremadura como un gran núcleo de producción y consumo ecológico y saludable… y eso me haría muy feliz.
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