La diseñadora emeritense Lorena Panea, ha sido recientemente galardonada con un ‘Dedal de Oro’. Este premio le reconoce como joven y prometedor talento de la moda en el panorama nacional.
Lorena, antes de todo felicitarla por su Dedal de Oro ¿Qué significa este premio para usted?
Muchas gracias. Significa que estoy haciendo las cosas bien y me da mucha fuerza para seguir con mi proyecto adelante.
Hace unos años se mudó a Barcelona para estudiar diseño ¿hay que salir de Extremadura para ser un profesional de la moda?
En el momento en que lo hice, si quería tener la mejor educación, desafortunadamente tenía que ir fuera. Aunque ahora se están haciendo algunas cosas nuevas, la concepción de la moda en Extremadura es algo muy tradicional. Todo está muy centrado en la figura de la modista, que no tiene conocimiento sobre el mercado de la moda. Si quieres tener la mejor formación, a veces, hay que moverse.
¿Cómo fue el proceso desde estudiar diseño a tener su empresa?
Fue un proceso bastante natural. En la universidad teníamos asignaturas que se centraban en la creación de tu propia marca. Nada más acabar, miré como estaba el panorama laboral. Como siempre quise crear mi propia marca, me puse en marcha, hice varias pruebas y me lancé.
¿En qué se inspira para crear sus diseños?
Al haber vivido en varios lugares, tengo varias influencias. Sin embargo tengo muy claro y siempre me inspiro en otras décadas, desde los años 40 a los 70. Influencias como el vintage, el savoir faire, el glam rock, siempre procuro tenerlas presente en cada prenda.
Entonces, en lo referente al diseño de moda, ¿cualquier tiempo pasado fue mejor?
En mi caso sí… (risas). Bueno, en realidad es más fácil mirar hacia atrás y evaluar lo que ha sido mejor hecho o lo que más te gusta… Se vuelve un poco más difícil hacerlo de cara al futuro (risas).
Lo que importa es ofrecer un producto con una relación calidad-precio adecuada

En países como Inglaterra, la moda vintage y de segunda mano es bastante popular, sin embargo en España no tiene el mismo efecto…
No te creas, yo en la tienda tengo una marca de ropa vintage y vienen muchos clientes preguntando exclusivamente por esas prendas. Cada vez se está perdiendo más ese miedo de comprar prendas de años pasados o incluso de segunda mano.
Usted define su estilo como femenino, elegante y ajeno a las imposiciones de la dictadura de las modas pasajeras. ¿Se puede vestir bien ignorando las tendencias de la temporada?
Hay una cosa que quería aclarar, la diferencia entre tendencia y moda. Lo que vemos en las tiendas en una temporada, eso es lo que llamaríamos moda. Por ejemplo, las “Rallas marineras”. La tendencia, sin embargo, es algo que existe siempre, como el vintage, punk, grunge… Hay veces que se ponen de moda más o menos, pero siempre están ahí y son siempre indudables.
Siempre he dicho que estas modas que se llevan a cabo cada temporada, son un movimiento de imitación. Realmente no te preguntan si te gusta, o si te sienta bien. Yo, con mi marca, lo que busco es la identidad de las tendencias que a mí más me gustan y no seguir lo que marca la dictadura de la moda.
En un mundo textil tan competitivo como en el que vivimos, usted arriesga y confecciona sus prendas en España. ¿Cree que el público valora ese esfuerzo económico tan grande?
Los clientes no lo valoran. En este sector lo que importa es ofrecer un producto con una relación calidad-precio adecuada. Si está hecho en China, Malaysia, Mérida o Badajoz da igual. Si es bonito, tiene buen precio y tiene una calidad que a la gente le encaje, entonces te lo va a comprar.
¿Qué opina sobre las grandes firmas que tienen sus talleres en países asiáticos? ¿Se puede llegar a competir con ellos?
En mi tienda yo tengo prendas de edición limitada, algunas son únicas, y tienen precios más bajos que algunas de las grandes cadenas. Estas grandes firmas tienen que sumar siempre el transporte, las tasas y el precio de tener tiendas en el centro de las principales ciudades. Para cubrir todo eso, aunque la prenda les haya costado menos que la mía, el precio es casi el mismo.
Yo con mi marca, no necesito tener una mega-tienda con 5 pisos en el centro de Madrid. Necesito tener una tienda del tamaño adecuado, ofrecer un buen servicio y además la ventaja de dar trabajo a personas de mi país.
Además de sus tiendas físicas, usted vende sus diseños on-line ¿Cree que el futuro está en las tiendas virtuales?
La venta on-line es un mercado emergente, pero para la industria textil no va a ser nunca el futuro, ni la base del negocio. Pocas veces una clienta va a comprar una prenda sin habérselo probado antes. Un ejemplo, de toda la facturación que Zara hace durante un año, su venta on-line es sólo de 1% y eso que tienen millones de tiendas físicas y el público conoce sus tallas y sabe lo que le queda bien y lo que no. Combinar el negocio on-line con la tienda física si lo veo más factible
¿Cómo se ve dentro de unos años? ¿qué proyectos a corto plazo tiene en mente emprender?
Tengo un plan de expansión pensado a través de tiendas propias.
Ya para terminar ¿cuál es su ciudad favorita para comprar ropa?
Paris y Londres. París tiene ese toque de lujo que desprende, todo muy cuidado, el detalle. Londres es más urbana, más cañera. Son dos estilos completamente diferentes.
Lorena Panea tiene su tienda en la calle Moreno de Vargas 9, Mérida. Para acceder a su página web, pulse aquí
¿Aún no tiene nuestras camisetas? Ya están disponible en nuestra tienda online. Entre pulsando aquí